jueves, 6 de enero de 2011

Al pesebre no fue el viejo panzón...

¡Feliz Día de Reyes!  En casa nunca se le dió gran importancia a Santa Cló, pero Los Reyes Magos, esos sí que eran bien esperados.  Como les relaté ayer el asunto empezaba desde la víspera y al llegar el día, lo primero que hacíamos era ir de cuarto en cuarto buscando debajo de todas las camas los regalos.  Además pasábamos inspección sobre lo que habían comido o no los camellos, siempre era emocionante encontrar que se lo habían comido todo.


Ese día había que ir a la iglesia primero y luego empezabamos nuevamente nuestra expedición por las casas de los tíos buscando lo que nos habían dejado.  La casa más esperada era la de mi tía pues allí estaban nuestros primos hermanos con quienes jugabamos sin parar durante horas.  Nadie pensaba que ese día marcaba el fin de las vacaciones de navidad en la escuela, de eso nos preocuparíamos después, en ese momento lo importante era jugar.


A continuación un pequeño regalo de Reyes, Modesto Nieves y la Orquesta Jíbara:  Yo creo en los Reyes.





2 comentarios:

  1. ¿y no se dieron empujones para ver quién terminaba con la laptop?

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  2. ja, ja, quién sabe y los pastores también formaron un motín, pero no creo esas cosas pasan solo en nuestro PR. Gracias por tu visita.

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